jueves, 21 de enero de 2010

Mi visado:la carambola que esperábamos

Después de pasarme toda la tarde dudando sobre hacer o no hacer este post, al final he decidido que lo tenía que hacer, y no como una obligación, si no para compartir con vosotros mis sentimientos en un día como hoy, ya que ha sido de los más especiales desde que estoy aquí en Bangladesh, y, mostrando algunos de mis sentimientos, me podéis, al mismo tiempo, sentir más cerca.


Como bien saben mis más allegados, hace cuatro meses que solicité mi visado, y han sido cuatro meses de muchos altibajos y preocupaciones, de sentirme como atado, sin poder salir del país sin problemas: cuando volví a España para pasar las vacaciones, la embajada española, para evitar complicaciones, tuvo que mandar una Nota Verbal al Ministerio de Asuntos Exteriores. Me daba miedo salir del país pensando que no me dejaran volver a entrar. Y hoy finalmente, después de tanto tiempo, me han dado mi visado y me siento extraño, como si saliera de la Caverna de Platón, como si hubiera estado mucho tiempo con los ojos tapados y de repente alguien me hubiera quitado el pañuelo que no me dejaba ver.


Sé que no estoy en la posición de opinar o protestar sobre cómo se han hecho las cosas, porque al fin y al cabo, tengo mi visado. Además, bueno, no me gusta opinar sobre cómo hacen los demás las cosas mientras las hagan bien, y éste es el caso. No quiero quejarme de haber estado tanto tiempo esperando si finalmente la cosecha a reunido sus frutos, y muy buenos. Sólo quiero aconsejar a todos aquellos que por algún motivo tengan que venir a trabajar a Bangladesh que tengan paciencia porque al final la espera tiene su merecido; además, si soy sincero, el hecho de que haya tenido que esperar tanto tiempo, con tantísimas preocupaciones, hace que esta alegría que siento sea, tal vez, más grande que si me lo hubieran aceptado en tres días. Y no sólo esto, si no que, incluso, esta espera y este gran acontecimiento de hoy han hecho que Bangladesh se me haga distinto. Recuerdo las angustias que sentía cuando iba a la Oficina de Extranjería, sin saber qué me iban a decir, sin saber por qué esquina de qué mesa dormían todos mis documentos. Ahora Bangladesh es más mío si cabe. Pero también soy más suyo, porque ya me ha aceptado. O mejor, por qué no, ya somos. Porque, al fin y al cabo, somos ya plural: nos hemos marcado mutuamente, en mi pasaporte ya hay una marca, un cuño que simboliza nuestra unión ya inolviable.


Cuando volvía a casa con mi pasaporte ya visado, atravesando media ciudad en un CNG, comprobaba que las miradas de esta gente inerme continuaban allí. Y pensaba que era muy curioso: muchas veces ellos mismos me han preguntado que por qué he elegido Bangladesh, si ellos están tratando de salir de aquí con la urgencia de encontrar una vida mejor. Y es que es una paradoja: yo he sido muy feliz hoy porque puedo pemanecer en el país sin problemas y ellos tratan de aunar todos sus esfuerzos y sus mínimos ahorros para salir de este agujero lleno de luz.


No soy de supersticiones ni de pensar en casualidades, pero a veces me da por pensar que hay días que están marcados por alguna especie de signos oscultos. Esta mañana llevaba un budita en el bolsillo que me regaló mi tía, una figurita que es un torito-imán para la nevera que me regaló mi familia y la alianza que lleva el nombre de la mujer con la que me voy a casar... Además, justo en el momento en el que mi pie tocaba suelo cuando bajaba del CNG que me ha llevado a la oficina de extranjeros, sin saber por qué, en mi MP3 ha empezado a sonar "Yasmine the light", de Explosions in the Sky. Aquellos que me conocen sabrán que un escalofrío ha invadido mi cuerpo como una aguja llena de espinas que inyectara en mí millones de hormigas... Y la verdad (la canción os la pongo al final del post por si queréis escucharla) es que me he sentido como el nombre del grupo: veía en todo el cielo de Dhaka explosiones de fuegos artificiales de todos los colores y sonidos, invadiendo el firmamento azul de esta ciudad, que, por fin, después de días grises y apagados, se ha visto poblado por un sol que, aunque tímido, quiere empezar a calentar estas calles húmedas y desapacibles.


Me traje en la maleta, regalo de mi cuñada, una bolsita de té con azafrán rojo griego y otras especias y quería esperar a una ocasión especial para saborearlo con el gusto, y no sólo con el olfato, pues el olor invadía mi cocina desde que llegué la semana pasada. Y he pensado que hoy era el día señalado para tomármelo lenta, rigurosa y espiritualmente. Con los ojos bien cerrados, como para memorizar su lángido sabor.


Espero que, aunque sea lejanamente (allá en lontananza como diría un amigo) hayáis compartido este pequeño momento de suave alegría. Dicen que hay días en los que das tu golpe bueno, y que una carambola a tres bandas introduce la bola negra en su agujero correcto. Hoy ha sido uno de esos días.


Disfrutad la canción como yo he disfrutado de ese golpe.


6 comentarios:

LA MAMI dijo...

Joderrrrrr!!!!!! perdón!!! como para no compartirlo corazón, vaya pedazo de explicación que oye llámame hortera, garrula, friki no se me da igual me ha puesto la carne de gallina.
Pues nada enhorabuena por ese visado, y eso que dices que es un agujero con luz, que no se olviden los que allí viven, que tu aportaste mas luz al estar entre ellos, para eso provienes de la tierra que te vio nacer.
Se feliz, y que te queda poquito ya para estar con tu mujercita, ¿que quedan 6 meses? eso esta a la vuelta de la esquina.
Que Dios os bendiga a los dos, y tu con esa ilusión que se denota en tus escritos cuando haces referencia a ello, vive estos meses y se pasaran mas rápido.
BESOS GUAPÍSIMO
Siempre la familia Ramos Pastor en mi corazón, eso no lo dudes

Pati dijo...

Teteee, casi se me saltan las lágrimas, que preciosidad de post has escrito, me ha encantado. Me has hecho sentir exactamente lo mismo que has sentido tu en el momento en que has sabido que ya tenias tu visado. No sabes cuanto me alegro, ahora ya puedes disfrutar mucho más, si cabe, todo lo que cada día experimentas en esa tierrita lejana que ahora ya es más tuya y tu más de ella.

Te quiero muchooo y me ha encantado que justamente hoy llevaras todos esos recuerditos que te tienen cerquita de España en tu mente y tu corazon y que fueron regalos tan especiales para ti, y que haya sonado tu cancion, madre mia, que casualidades más bonitas.

Te quieroooo, hay que celebrarlo!!!!besos y abrazosss

Luisa dijo...

Paco, ya te vale, llamar mujer a mi hermana, jo que es la pequeña y eso me convierte a mí casi en anciana, que no se repita, jaja.
Me alegro infinitamente de que tengas por fin tu visado y de que todos los astros se hayan alineado haciendo presentes a todos los que te queremos de una forma u otra. Qué curiosa es la vida y qué pequeños grandes detalles tiene Dios para con nosotros.
Espero que el té te haya gustado; es fantástico (y Rooibos, que olvídé decírtelo); si es así, procuraré conseguir más para cuando vengas; te estoy viendo tomándolo. Qué extraño es todo, parece como si ahora el tiempo transcurriera de otro modo.
En fin, que me alegra mucho que tu día haya sido así, y que hayas dejado de ser un "expatriado" como decías a veces.
Un abrazote muy fuerte.

Francisco dijo...

Ole ole esa mi queridisima tía. Ya eres mi mami cariñet... Mira que me gustan tus comentarios, me animan un montón!!! Ah, y gracias por lo de la luz... Eres un solete corason!!! Un besote muy fuerte guapa!!!

Patiusca!!!! Oye, si lloras que sea de alegría eh!!! La verdad es que ha sido un día genial, en el que he sentido cosas que no puedo explicar... Tengo ganas de que vengais por aqui para poder sentir todo lo que yo siento... Sí, esos recuerdos son el pedazo de la familia y de España que me dejaron traerme en la maleta, y mira que bien me han ido... Son mis mejores amuletos... Os quiero un monton!!!!

Ay, Luisa, tú y tus comentarios siempre me hacéis llorar...Os echo muchísimo de menos... La verdad es que el té me lo he tomado imaginando que estabas aquí a mi lado... degustándolo suavemente... Estaba buenísimo. El papelito que cubría la bolsita de té me lo he guardado para pegarlo cuando llegue al día 21 de Enero en el diario que estoy escribiendo. Un besazo muyyyyy grande y nunca cambies por favor...

Purita dijo...

Hola mi hombre!!!
Cómo me he alegrado cuando he sabido que ya tenías tu visado!!! Me hubiera gustado tanto compartir esas emociones, allí, contigo... Es cierto que las he compartido porque, en cierto modo, cuando miras a tu lado, allí estoy, siempre. Yo si que he llorado con tu post. Una mezcla de alegría y tristeza, ¿me entiendes, no?
Bueno, tenemos que pensar que cada día que pasa es un día menos para volver a estar juntos y celebrar nuestro amor de la forma más grande que nunca hemos hecho (aunque más adelante, en unos años quizás) lo celebraremos y lo mostraremos al mundo de otra forma aún más grande.
Te amo.

Francisco dijo...

Hola corazón!!!! La verdad es que hubiera sido genial compartir esa alegría con un pedazo de abrazo!!! Y sí, estás aquí conmigo allá donde voy y en todo lo que hago... Me has hecho llorar con tu comentario porque me he dado cuenta de que estás muy lejos... Y sí, te entiendo, es lo mismo que lo que siento yo todos los días, una mezcla entre alegría y tristeza que no hace más que encristalarme los ojos...
Sí, cada día que pasa estamos más cerca de nuestra unión eterna, y espero que ya no volvamos a separarnos nunca más...
Te amo